Los neumáticos desempeñan un papel crucial en la seguridad y el rendimiento de un vehículo. La presión adecuada de los neumáticos es esencial para garantizar una conducción segura y eficiente en términos de consumo de combustible.
Goodyear, uno de los principales fabricantes de neumáticos del mundo, ha desarrollado una innovadora tecnología llamada «Air Maintenance Technology» (AMT) que mantiene automáticamente la presión correcta de los neumáticos.
En este artículo, analizaremos cómo funciona esta tecnología y cómo puede beneficiar a los conductores y al medio ambiente:
¿Qué es la tecnología de mantenimiento de aire (AMT) de Goodyear?
La tecnología de mantenimiento de aire (AMT) es un sistema patentado por Goodyear que permite a los neumáticos mantener automáticamente la presión correcta sin necesidad de intervención externa. La AMT es una innovación revolucionaria en la industria automotriz, ya que ayuda a reducir el desgaste de los neumáticos, mejorar la eficiencia del combustible y aumentar la seguridad en la carretera.
¿Cómo funciona la tecnología AMT de Goodyear?
El sistema AMT utiliza una bomba de aire integrada en el neumático que funciona mediante la energía generada por el movimiento del propio neumático.
Cuando el neumático gira, el aire del interior se comprime y se expande. Esta energía se utiliza para alimentar la bomba, que a su vez inyecta aire en el neumático para mantener la presión correcta.
Cuando la presión del neumático cae por debajo del nivel óptimo, la válvula del sistema AMT se abre automáticamente y la bomba de aire comienza a funcionar. El aire se comprime en la bomba y se inyecta en el neumático hasta que se alcanza la presión adecuada. Una vez que se logra la presión correcta, la válvula se cierra automáticamente y la bomba de aire se detiene.

Beneficios de la tecnología AMT
La tecnología AMT de Goodyear ofrece varios beneficios significativos para los conductores y el medio ambiente. Estos incluyen:
- Ahorro de combustible: Los neumáticos con la presión correcta tienen una menor resistencia al rodaje, lo que resulta en un menor consumo de combustible. Según Goodyear, mantener la presión adecuada de los neumáticos puede mejorar la eficiencia del combustible en un 3,3%.
- Mayor vida útil de los neumáticos: La presión incorrecta de los neumáticos puede provocar un desgaste desigual y acelerar su deterioro. La tecnología AMT ayuda a mantener la presión correcta de los neumáticos, lo que prolonga su vida útil y reduce la necesidad de reemplazarlos con frecuencia.
- Mejora de la seguridad: Los neumáticos con la presión adecuada proporcionan un mejor agarre y un rendimiento de frenado óptimo, lo que mejora la seguridad en la carretera
- Reducción de las emisiones de CO2: Al mejorar la eficiencia del combustible, la tecnología AMT también ayuda a reducir las emisiones de dióxido de carbono, lo que contribuye a proteger el medio ambiente y a cumplir con las regulaciones de emisiones.
- Comodidad y ahorro de tiempo: Con la tecnología AMT, los conductores ya no necesitan preocuparse por revisar y ajustar la presión de los neumáticos manualmente. Esto no solo ahorra tiempo, sino que también evita la molestia de lidiar con bombas de aire y manómetros en las estaciones de servicio.
Fase de pruebas y disponibilidad
Goodyear ha estado probando su tecnología AMT en diferentes tipos de vehículos y condiciones de conducción para asegurar su eficacia y fiabilidad. Aunque la AMT aún se encuentra en fase de pruebas, se espera que la tecnología esté disponible en el mercado en un futuro próximo.
La tecnología de mantenimiento de aire de Goodyear podría revolucionar la forma en que los conductores cuidan sus neumáticos y la forma en que los fabricantes de automóviles diseñan sus vehículos.
Con el aumento de la conciencia sobre la importancia de la eficiencia energética y la sostenibilidad, es probable que la demanda de soluciones innovadoras como la AMT siga creciendo.
La tecnología de mantenimiento de aire (AMT) de Goodyear es una innovación revolucionaria en la industria de los neumáticos que permite a los neumáticos mantener automáticamente la presión correcta sin necesidad de intervención externa.
Esta tecnología no solo mejora la eficiencia del combustible y la vida útil de los neumáticos, sino que también contribuye a una mayor seguridad en la carretera y a la reducción de las emisiones de CO2.
Aunque la AMT aún se encuentra en fase de pruebas, su potencial para transformar el cuidado de los neumáticos y el diseño de los vehículos es indiscutible. Estaremos atentos a los desarrollos futuros de esta prometedora tecnología.